Adolfo Suárez en Las Grandes Biografías de Zafarrancho Vilima

Hoy recordaremos a la ficha de empalme entre la dictadura de Paquita, la culona (así lo llamaba Queipo de Llanos) y la monarquía parlamentaria que nos metieron mientras Miguel Bosé nos distraía en Aplauso bailando como Eva Nasarre con la tensión baja. Hoy recordaremos a Adolfo Suárez González, el Presiguapo de antes. El pequeño Adolfo nació el 25 de septiembre de 1932, en Cebreros, un pequeño pueblo de Ávila porque aunque sus padres ya se habían mudado a esta ciudad, su madre quería que en el DNI pusiera Cebreros, y eso que antes parir en un pueblo chico era como hacerte una brecha en Pozoblanco. Sus padres fueron Hipólito Suárez y Herminia González, y aunque sus nombres estaban predestinados a ser actores de “Cuéntame”, ambos lucharon contra su destino y se dedicaron, ella a ser muy devota y a tener niños con la lú apagá, y él a ser procurador de tribunales y jugador de apostá cosas, que la mujé cuando salía le quitaba los billetes grandes, las escrituras de la casa y un G.I.Joe con su cajita original, o también de médico con las mushasha que le dejaban jugá con la lú encendía. Tuvo 4 hermanos, Hipólito, Mari Carmen, (casada con el fundador de la UCD que tenía tó la cara de Francis Lorenzo), Ricardo y José María. Adolfo fue mal estudiante, no leía y sus aficiones eran la fiesta, las cartas y jugar al teto. Como Froilan, pero en guapo. Pa compensá el disgusto de la madre, fundó y presidió diversos organismos asociados a Acción Católica, que olía a cerraito, como le gustaba a ella. Estudió por libre la carrera de Derecho en Salamanca, que le costó más trabajo que a Pablo Casado, y en 1955, con 23 años se tuvo que poner a trabajar porque su padre hizo un Dioni y los dejó más tirao que un tren de Renfe. Ante la imposibilidad de mantener a toda su familia tuvo la suerte de conocer a un falangista del Opus que era gobernador civil. Adolfo entró en el 58 en el Colegio Mayor Francisco Franco pa prepararse unas oposiciones y salió en el 59 doctorado en Derecho, como Pablo Casado. Aquí empieza su trayectoria política dentro de la estructura del Franquismo, por si todavía hay gente que cree que Adolfo era aire fresco de Victorio&Lucchino. Entró en 1958 en la Secretaría General del Movimiento haciendo fotocopias y salió en 1968 siendo gobernador civil de Segovia. En 1961 se casa con Amparo Illana, con quién tuvo 5 hijos, entre ellos la presentadora de telediario Sonsóles Suárez y el Adolfo Suárez Illana que iba al servicio que estaba al fondo a la izquierda y acabó de candidato del PP por Castilla-La Mancha. En esta época era cuando daba más coraje a sus opositores porque tenía pelaso, le caía el traje que ni a un bombero y si te sonreía te dejaba embarazao. Por ponerle alguna peguita, tenía nariz pa acertá la fecha de caducidad de los yogures. En 1969 lo hicieron presidente de RTVE hasta 1973, porque acordarse que a los de Acción Católica le gustaba más una censura que a Felipe González cambiarse la chaqueta de pana por una de Burberry. Pese a ocupar en 1975 la presidencia de Unión del Pueblo Español, tuvo que dejarlo porque Arias Navarro lo nombró ministro secretario general del Movimiento justito después del Españoles, Franco, ha muerto. En julio de 1976, el rey Juan Carlos I le encargó una furgoneta y la formación de un gobierno, desmontando las estructuras franquistas. Spoiler: Sólo consiguió la furgoneta. El 15 de junio de 1977 Adolfo Suárez gana las primeras elecciones libres desde 1936, con un conglomerado de partidos de “centro” bajo las siglas UCD, el SUMAR de antes. Bajo su gobierno se comió más marrones que Perro Sanxe: - Se aprobó la ley de amnistía de 1977, para los presos políticos de la dictadura, PEEEEROOOO que también se aplicaba a los delitos cometidos con intencionalidad política, a ver cómo si no le iban a dar las 4 medallas a Billy, el niño. - Tuvo que hacer un referéndum al pueblo, pero sin lacitos amarillos que ya estaban cogíos, porque tenían que preguntar si querían la Constitución y al Emérito, pero Adolfo le encargó al CIS una encuesta de lo del Emérito y Tezanos le dijo que como le preguntara a la gente al Emérito no le daba tiempo de meter en Suiza ni 3.000 pesetas. Pero Adolfo, que era más listo que una calculadora científica, colocó en la ley las palabras REY y MONARQUÍA, y así se deducía que había sido sometido a referéndum: el referéndum cebolla, que pregunto lo que me sale de la PO... Y así, amigos y amigas, fue cómo nos comimos a los Borbones, porque a ellos le salió de los… El PSOE de Felipe González le hizo una moción de censura que tuvo menos éxito que un polvorón de limón, pero que a él le dio mucha pena y decidió dimitir. Por su papel del en proceso de transición “GUIÑO, GUIÑO, CODASO, CODASO” el rey JuanCarlos I le otorgó el título de Duque de Suárez. Tristemente, el Alzheimer borró todos estos acontecimientos y Adolfo Suárez nos dejaba el 23 de marzo de 2014, a los 81 años, aunque ustedes siempre podrán recordarlo cada vez que vean un G.I.Joe con su cajita original o alguien les encargue una furgoneta.